Lorenzo Mendoza y Carlos Osorio: dos ejemplos de visión de país

Definitivamente no se puede tender puentes para trabajar con este gobierno. Desde Hugo Chávez hasta el último y más inocuo de sus ministros, diputados y partidarios del MVR, PSUV o cualquiera sean las siglas que identifican a su gestión gubernamental y la de los partidos políticos que todavía lo respaldan, deben salir en diciembre del año que viene por incapaces, por soberbios y, lo más importante, por negarse a construir un país donde todos los venezolanos podamos vivir en paz y en armonía.

Leo las declaraciones de Lorenzo Mendoza en la sede de la Cámara Venezolana Americana de Comercio e Industrias (Venamcham), quien habla de la necesidad de copiar los buenos ejemplos, de mirar hacia adelante con optimismo; de construir y edificar en positivo y quien puso como ejemplo a ese  venezolano que fue Ricardo Zuloaga, (fundador de la Electricidad de Caracas), y todo lo que él significó para el progreso económico y social de Venezuela.

Señaló el presidente de Empresas Polar, que “la indiferencia no puede existir. Esta actitud nos está ocurriendo y nos está pasando muchísimo. Somos indiferentes frente a acontecimientos, eventos, situaciones, hacia lo interno y hacia lo externo. No podemos ni debemos ser indiferentes. Cada uno tiene oportunidades de demostrar liderazgo y al mismo tiempo no ser indiferentes frente a los acontecimientos que tenemos en nuestras decisiones cotidianas". E insistió al auditorio, que "el país requiere, en este momento más que nunca, que no seamos indiferentes".

Más adelante añadió  que parecemos “una sociedad que en vez de admirar y ver gente que tiene éxito y tratar de indagar el por qué de ese éxito y de cómo vincularse a ello, más bien le buscamos la caída. Y no estamos pendientes de cómo copiar o mejorar alguno de esos rasgos, basados en el esfuerzo y el compromiso".

-Por ahí es que deben ir los tiros, comenté en voz alta, aunque no tenía a nadie que me escuchara.

Más adelante, y en el mismo periódico digital, leo las declaraciones del ministro de Alimentación, Carlos Osorio, quien en tono amenazante declara: “Si tenemos que importar todo lo haremos”. Ahí, sólo me quedó fruncir el ceño y exclamar: “¿Con qué dinero; de dónde van a sacar los montos para eso; será que se les olvidó los desastres de todo tipo, tamaño y color, recientes por cierto, de las importaciones de Pdval? Por supuesto pensé: “Es que estos tipos no aprenden, ni quieren aprender”.

Pero además, el titular del despacho alimentario la emprende de nuevo contra el sector privado nacional, al señalar que "si tenemos que importarlo todo, para que protejamos a la población, lo haremos. No significa que lo estemos haciendo (...) pero no vamos a permitir que venga un sector privado y comience a manipular y cambie los precios internacionalmente, porque les interesa el negocio cambiario".

Y es aquí, donde quisiera preguntarle al ministro Osorio, cuáles son los empresarios que les interesa el “negocio cambiario”. Y me tomo la atribución de responderle: “Los que hacen negocios con el gobierno, ministro Osorio; los que conforman esa “asociación” que se llama Empreven, la cual por cierto estuvo presidida por Alejandro Uzcátegui, quien está involucrado en presuntos manejos dolosos  con el Banco Real, una entidad financiera que tuvo que intervenir el gobierno de Hugo Chávez y quien estuvo en Fedecámaras, pero nunca hizo nada útil por ese gremio y por esa entidad gremial.

Será que el titular de Alimentación se olvidó de que la Interpol emitió una alerta roja en contra de Uzcátegui y colocó su ficha en su sitio web de Internet. Será que Osorio no leyó u oyó  en los diversos medios de comunicación que el pasado 9 de diciembre se hizo una denuncia porque  el ex presidente de Empreven había escapado de Venezuela y, de inmediato, el día 10 Interpol emitió órdenes de detención contra el ¿empresario? y otros 9 banqueros.

Entonces ministro Osorio, quién es el que está haciendo “el negocio bancario”; quién es el que está faltando a la ética y destruyendo y robando al país. Y este es un simple ejemplo que traigo a colación. De robos, saqueos, pillajes, trampas y trácalas, usted sabe y mucho.

Es por eso que tenemos que estar claros. Chávez no puede ser presidente de nuevo. Han sido doce años de fracasos, ruina, robos, saqueos. Doce años de retrocesos sociales, culturales, económicos y políticos; doce años de un gobierno que lo único que ha logrado es dividirnos, empobrecernos y ponernos a pasar vergüenza y pena en el exterior. (Creo que con la cadena de esta semana y lo del planeta  Marte y el imperialismo ilustro a que me refiero con eso de la pena y la vergüenza).

No quiero decir con esto que los integrantes de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) la tengan facilita. No, nada que ver. Ahora es que tienen que trabajar y bregar por ese triunfo en diciembre del año que viene. Chávez no va a entregar el poder tan fácil y en la MUD tienen que estar claros con esto.  Y sea quien sea el candidato habrá que apoyarlo.

Yo sólo espero que sea un candidato que se junte con los mejores, sean estos de donde sean. Que gobierne para unir, para crecer y para lograr el bienestar de todos; del país en general pues. No la va a tener nada sencillo, más sabiendo el estado de deterioro social, moral y económico en que nos lo van a entregar.

Por eso insisto: Chávez y sus partidarios no pueden seguir gobernando, pero ni siquiera una junta de vecinos. Así de radical lo escribo. Y ejemplos sobran, como el que acabo de enseñarles.