Un 17 de marzo, de hace ya 33 años, la televisión venezolana se quedó sin imágenes. Renny Ottolina, el animador "Número uno" del país, fallecía en un accidente de aviación. Este valenciano cuyo nombre verdadero era Renaldo José Ottolina Pinto, ha marcado un hito en los medios audiovisuales y de comunicación, en el país y en el mundo, y a más de tres décadas de su desparición física, sigue siendo recordado por su calidad profesional, su capacidad para transmitir un mensaje al público, y por su amor y ganas de crear conciencia ciudadana. Sus programas "El Show de Renny", todos los mediodías, y "Renny Presenta", los domingos en la noche, marcaron un hito en la televisión venezolana entre los 60 y los 70.
Radio Caracas Televisión (RCTV) y Venezolana de Televisión (VTV), fueron las plantas de televisión comercial que mostraron al público a un venezolano con un criterio y una visión sobre los medios de comunicación que no ha podido ser imitado. Los mejores artistas nacionales y extranjeros para esos años, fueron presentados en los programas que él conducía. Contó con un equipo de profesionales que marcó un hito histórico. Muchos ya retirados, y otros desparecidos, sin embargo todos coincidían y coinciden en la profesionalidad y la verticalidad humana de este carabobeño ejemplar. Hechos como poseer el mayor encendido de aparatos de televisión durante sus programas; haber producido y dirigido el primer programa en color para la televisión nacional; también produjo y dirigió programas grabados en el extranjero que fueron luego, adquiridos por televisoras de otros países. Era el vendedor con mayor poder de penetración y convencimiento de nuestra pantalla, el Número Uno, como se le bautizó y se le conocía. Por razones familiares, tuve la suerte de conocerlo y de asistir a varios programas.
Era todo un personaje y un venezolano consciente del deterioro social y político que estaba comenzando a producirse en el país, de ahí su motivación, casi a niveles de regaño, de crear conciencia ciudadana para que no llegásemos a caer en lo que actualmente estamos. Si algo tuvo Renny Ottolina fue visión de país y una de sus muestras más evidentes sobre este tema son sus cuñas, donde hace varios llamados al respeto de las instituciones, de los servicios públicos, de las leyes y normativas de tránsito. Cualquier persona que supere los 40 años de edad, recuerda el impacto que causó aquella cuña donde compara a los peatones con un grupo de vacas, que deben ser arriadas para poder mantener el orden y la disciplina. Por cierto, hay un canal regional, TV Familia, que transmite esas cuñas todavía...
Que necesarias siguen siendo, a más de 30 años de haber sido hechas. No se si tenía futuro político. Discutir sobre eso es caer en el terreno de las especulaciones y las suposiciones sobre los "fenómenos electorales" en Venezuela. Sólo puedo decir que fue un personaje carismático, con un ego muy grande, pero con un nivel de conocimientos y de inteligencia que lo hacen indispensable, a pesar de los 33 años sin él. Tan es así, que no hay nadie que todavía se le acerque a su nivel.
Un carabobeño ejemplar que sigue siendo el Número Uno de la televisión nacional.
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